Avilés da un paso más en la apuesta por su Festival de Cine y Arquitectura
Fotograma del documental Visual Acoustics que podrá verse en el Festival de Cine y Arquitectura de Avilés.
Fotograma del documental ‘Visual Acoustics’ que podrá verse en el Festival de Cine y Arquitectura de Avilés.
En 2013 fue la presentación, el lanzamiento de la idea. Y, en vista de la buena acogida, este año llega más material, bueno y novedoso, para consolidar la estructura. Hablamos del Festival Internacional de Cine y Arquitectura de Avilés (FicArq), que se celebra entre el 15 y el 19 de julio. Es el único de esta modalidad en España, y continúa la pauta de los festivales de Rotterdam, Chicago y Santiago de Chile. «El asunto da para mucho debate, y ahora más que nunca», subraya Ana María Álvarez Muriel, su creadora y directora.
Álvarez Muriel está tan ilusionada como empeñada en convertir a su querida Avilés en punto de debate arquitectónico y en otro referente de turismo cultural en la cornisa cantábrica -en esa línea de alta tensión cultural que se está creando con el Guggenheim de Bilbao y el Centro Botín de Santander, que abrirá en 2015-. Cree que el casco histórico de Avilés -oscurecido en las últimas décadas por su potencia industrial, pero con joyas como el Palacio Valdés, sede también del festival- y el maravilloso regalo que el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer hizo a la Comunidad -su conjunto de edificios armoniza perfectamente, con un punto extraterrestre, con el entorno de la ciudad asturiana- se lo merecen.
«El año pasado lanzamos la idea, y fue un éxito, gracias sobre todo al fantástico equipo que formamos. En 2014 la consolidamos. Y en 2015 queremos ya una sección oficial, con películas a competición», subraya la directora del FicArq.
Este verano hay varias piezas suculentas en la cita avilesa. Destaca el documental que narra el titánico proceso de reforma y ampliación -ha durado diez años- del RijksMuseum, en Amsterdam, proyectado por los arquitectos sevillanos Cruz y Ortiz, que presentarán esta cinta en FicArq 2014; y la película sobre El Croquis, una de las publicaciones de referencia internacional en el sector, realizada por uno de sus directores, Richard Levene, quien protagonizará una de las conferencias del festival y también recogerá uno de los premios. Junto a ambos títulos, películas documentales sobre cuestiones de actualidad, como Casas para todos, un recorrido por los estragos que ha dejado en España la burbuja inmobiliaria bajo el prisma del director (y arqueólogo) Gereon Wetzel, director del documental El Bulli, cooking in progress. La cámara de Wetzel pasea por unos cuantos de los 30.000 pisos vacíos del país, un universo paralelo que roza y muchas veces traspasa el absurdo. También llega a FicArq el premiado trabajo de Eric Bricker Visual Acoustics, un documental que enfoca la vida y obra del fotógrafo Julius Schulman, autor de algunas de las instantáneas más icónicas de la historia de la arquitectura. De Lloyd Wright a Gehry, su obra es un compendio histórico de un momento único en la arquitectura, pero también deja entrever la interesante figura del autor, que el dossier del festival describe como «un elegante caballero con mirada y olfato para acercar al gran público los secretos de las grandes propuestas arquitectónicas de los últimos tiempos».
El festival se levanta sobre la iniciativa privada de Álvarez Muriel, y apenas ha contado con ayudas públicas; algo que es de esperar que llegue en próximas ediciones para apuntalar la propuesta. «Llevo 19 años trabajando en cine como directora de producción. Y he llegado a la conclusión de que es lo que mejor se me da: conseguir cosas. Y dentro de esas cosas, ahora mi prioridad es el FicArq, porque creo que es algo único en España, y que Avilés se lo tiene bien ganado, para que venga aquí gente diversa y debatan sobre temas culturales. Sin prisas, con tiempo y con fundamento. El festival quiere ser, sobre todo, una cita amable, abierta a la ciudad, a la gente, a los profesionales, y que reflexione sobre un mundo que necesita introducir el concepto de sostenibilidad en su manera de crecer. Y qué mejor para eso que aunar cine y arquitectura». Buen momento el presente para el debate sosegado sobre arquitectura y urbanismo; de hecho, el lema del festival de este año es Transformaciones -y en ese concepto se basa su llamativa campaña de anuncios-, porque nadie duda ya de que vivimos una época de cambio.
Entre el repaso a grandes figuras de la arquitectura, FicArq se ha detenido este año en tres muy grandes. La sección Cine y Arquitectura se abre con la proyección del documental Amancio Williams, que repasa la trayectoria del peculiar arquitecto e inventor argentino, uno de los referentes más desconocidos del Movimiento Moderno en Latinoamérica. Autor de la malograda Casa sobre el Arroyo, en Mar de Plata, es sabida su relación con Le Corbusier. De hecho, dirigió el único proyecto que el suizo diseñó en Sudamérica, la casa Curutchet. Y, ya que este año el país invitado es Brasil, tierra de transformaciones, el festival atiende la trayectoria de dos arquitectos brasileños imprescindibles: Mendes da Rocha, de 86 años, y que en 2006 obtuvo el prestigioso Premio Pritzker, y la ítalo-brasileña Lina do Bardi, fallecida en 1992, uno de los grandes nombres femeninos de la historia de la arquitectura. Ambos tienen sus obras más emblemáticas en Sao Paulo, lo que dota a esta megaurbe de un indudable atractivo.
Ana María Álvarez Muriel quiere subrayar también dos secciones de cortos: Por segundo año, y de nuevo con la colaboración de Yahoo España! a través de su plataforma Flickr, FicArq convoca a las películas mínimas –de un máximo de 120 segundos de duración- que reflexionen sobre arquitectura. En esta edición, el concurso de Microfilms premiará las tres mejores propuestas en torno al tema La Ciudad en Movimiento. Los finalistas y galardonados se conocerán en la gala de inauguración del festival, que proyectará las 15 mejores piezas del certamen a lo largo de sus cuatro días de programación. El otro ciclo se construye en torno al proyecto de investigación Ruptura silenciosa, con trabajos realizados por la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Oporto.
Además, FicArq renueva la actividad paralela dedicada a los más pequeños, Arquipeques, en colaboración con LEGO, con el objetivo de acercarles la arquitectura. Este año, el proyecto se ha propuesto todo un reto: que, además de casas, pisos, rascacielos…, los pequeños participantes reproduzcan construcciones emblemáticas de todo el mundo, de la torre de Pisa a la torre Eiffel.
Para abrirse a más públicos, ya en el terreno estrictamente cinematográfico, el FicArq, que premia este año a la actriz Terele Pávez -de registros inigualables en su manera de construir los papeles-, mostrará la nueva cinta de John Carney, director de Once, Begin agrian, con Keira Knightley, sobre el amor entre dos compositores, y la comedia de Marcos Carnevale que ha arrasado en Argentina, Corazón de León; además de dos esperados estrenos europeos: la alemana Destino Marrakech, de Caroline Link, oscar a la mejor película extranjera por Un lugar en África; y la italiana Viajo Sola, que retrata a Irene, una mujer soltera, guapa y en la cuarentena, entregada a su trabajo de inspectora de hoteles de lujo, que disfruta de los mayores placeres y los resorts más impecables, pero siempre sola y de incógnito, lo que le hace replantearse en un momento dado su trayectoria vital y profesional.
Tiempos, en fin, de transformaciones. Desde muchas perspectivas, que este mes pasan por Avilés, ciudad también en proceso de cambio y reinvención.
La gala inaugural de FicArq 2014 será el próximo 15 de julio en el Teatro Valdés, que también acogerá el tradicional baile del festival el viernes 18. Además del Valdés, son sedes del festival la casa de la Cultura de Avilés y el Centro Niemeyer, cuyo auditorio acogerá la ceremonia de clausura. Estas galas tienen un precio de 15 €, incluida la proyección.
La votación para el concurso de ‘Microfilms’ está ya abierta a través de flickr: www.ficarq.es/concurso.
‘Arquipeques’ se desarrollará los días 16, 17 y 18 de julio entre 18.00 y 20.30 h. El plazo de inscripción ya está abierto en la web del festival; las plazas, limitadas, se darán por riguroso orden de inscripción.
Las entradas para los pases de películas son gratuitas o con un precio de 5 € para determinadas secciones, como ‘El cine que amamos’.
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