‘Cowa!’, la oportunidad perfecta para iniciarse en el ‘manga’

Detalle de la portada de Cowa.

Detalle de la portada de Cowa.

Detalle de la portada de Cowa.

Entre las numerosas novedades editoriales de cómic que se publican este mes de abril, previo al 32 Salón Internacional del cómic de Barcelona (15-18 de mayo), destacamos este manga autoconclusivo, creado por Akira Toriyama justo después de terminar la mundialmente conocida ‘Dragon Ball‘ (1984-1995). En ‘Cowa!‘, un Toriyama liberado de su asfixiante responsabilidad, experimenta e ilustra un bonito cuento infantil, con un registro gráfico y narrativo que recuerda sus orígenes humorísticos. Una buena oportunidad para iniciarse en el manga y desterrar tantos prejuicios que se han hecho fuertes en España.

Cowa! es una simpática historia de amistad entre unos jóvenes fantasmas y un humano solitario. Ambos emprenderán un viaje que sirve de excusa para conocerse mejor y vivir aventuras. Sin mayor pretensión que pasar un buen rato, Cowa! puede gustar a públicos de todas las edades.

Aprovechando este lanzamiento vamos a tratar de desterrar algunos tópicos y prejuicios que han evitado que mucho público objetivo, amante de multitud de expresiones artísticas y culturales, se haya acercado al mundo del manga, ya sea por desconocimiento o porque lo poco que conoce son estereotipos negativos. La opinión pública ha rechazado el manga, debido, en gran parte, a la errónea distribución que ha sufrido en nuestro país desde principios de los años noventa.

Cuando se oyen las palabras manga o anime, en lo primero que se suele pensar es en dibujos animados violentos o eróticos. Son pocos los que lo asocian a series de animación con grandes valores morales como Heidi (1974) o a películas de animación como Mi Vecino Totoro (Hayao Miyazaki, 1988). Así que entremos en la primera de una serie de entregas de El Asombrario que, en la línea de esta revista, servirán para abrirnos los ojos (no tanto como los personajes manga, pero casi).

¿Qué es? El artista japonés Hokusai acuñó en 1814 el término manga, en dos kanjis (ideogramas japoneses) que significaban literalmente “bocetos caprichosos”. Aunque actualmente se traduce por el literal man (involuntario, a pesar de uno mismo) y ga (dibujo), es decir, dibujo involuntario. En la versión inglesa del Diccionario de Oxford se define como “Estilo de cómic y novela gráfica japonesa, que gusta tanto a adultos como a jóvenes”. Ver a un adulto leyendo cómic sigue chocando mucho en Occidente.

Rasgos característicos. El manga es un tipo de cómic, claramente influenciado por el americano que llegó a Japón con la ocupación (1945-1951) posterior a la Segunda Guerra Mundial. Impulsado por Osamu Tezuka (1928-1989), un licenciado en Medicina que no ejerció profesionalmente pero que triunfó con la plumilla. Él rompió con los estándares del cómic y desarrolló los tres estilos que aún hoy permanecen vigentes. Ente sus principales aportaciones destacan un sistema de narración cinemático (más dinámico que en el cómic estadounidense), la importancia de la composición de la página como un todo por encima de las viñetas de forma individual, un nuevo arte secuencial donde la imagen importa más que el texto y el estándar de que los ojos sean muy grandes (y no es, como dice la creencia popular, que los japoneses nos vean a nosotros, los occidentales, con los ojos grandes; simplemente es influencia de los dibujos de Walt Disney).

Los formatos también varían mucho. El número de páginas de una publicación manga es mayor que el de los comic-book americanos o los álbumes BD europeos. Otra diferencia es el escaso uso del color. El manga se edita en blanco y negro, salvo portada y alguna página suelta.La última diferencia es el propio sentido de lectura japonés, inverso al occidental. Las publicaciones se leen de derecha a izquierda (también en España por expreso deseo de los autores), lo mismo con los globos de diálogo de las viñetas, que además son más grandes porque originalmente se leen de arriba a abajo.

Estilos: Shonen, Shojo y Seinen. Existen diversos estilos muy diferenciados que sirven para clasificarlos (según el público al que van dirigidos). Destacan tres, que son los más comunes:

– Shonen (chico en japonés): manga para chicos jóvenes adolescentes. Suelen ser de temática de aventuras, lucha, deportes… Dragon Ball, One Piece o Naruto. por ejemplo.

– Shojo (chica en japonés): dedicado al público femenino adolescente. Normalmente de género romance. Marmalade Boy (La familia crece), Nana o Candy, Candy.

– Seinen (adulto en japonés): de temática más seria, dirigidos a un público adulto. Aquí la temática es más variada; los hay de samurais (El lobo solitario y su cachorro), históricos (Adolf),  futuristas (Gantz) o costumbristas (El almanaque de mi padre).

Hay otros más minoritarios, como el Kodomo (niño en japonés), dedicado a los más pequeños, y multitud de subgéneros más específicos o minoritarios. Generalmente son de tipo seinen y adaptados a cada ámbito de la vida. Por ejemplo, si te interesan las finanzas, encontrarás varios mangas cuya trama principal sea esa. Esta clasificación o segmentación por públicos es meramente indicativa, pues muchos adultos y chicas leen obras shonen, que son las más populares y conocidas, y muchos chicos leen manga para chicas. En la variedad está el gusto.

Ejemplo de 'manga' seinen. 'El lobo solitario y su cachorro.'

Ejemplo de ‘manga’ seinen. ‘El lobo solitario y su cachorro.’

Diferencia entre ‘manga’ y ‘anime’. Manga hace referencia solo al papel impreso. Según el éxito que cosechan las distintas series manga, se hace una adaptación animada (anime) segmentada y programada en función de la franja horaria de su público. Y aquí es donde surge el gran problema que tiene el manga/anime en España. No se entendió que unos dibujos animados pudieran estar dedicados a un público adulto. Y como eran dibujos animados, se colocaron en franjas horarias infantiles sin tener en cuenta los contenidos que se emitían. Las consecuencias no tardaron en llegar: denuncias de padres escandalizados por lo que veían sus hijos, series retiradas de las parrillas y series censuradas (destrozándolas argumentalmente) para tratar de suavizarlas. Dragon Ball fue retirada de Telemadrid a mediados de los noventa por ser violenta, aunque luego fue recuperada por Antena 3 y ahora, con la televisión digital, ha encontrado su franja nocturna en Boing. Marmalade Boy (La familia crece) fue retirada a principios de 2000 de las tardes de La 2 de TVE porque fomentaba las relaciones amorosas entre adolescentes. Al final, todo lo que rodeaba al manga/anime resultaba polémico. Cuando se conoció el Hentai (de temática erótica), ya se concluyó que los japoneses estaban locos por hacer dibujos animados de temática sexual.

El ‘manga’ en España. En el panorama editorial, la tendencia negativa se ha ido corrigiendo con los años. Siempre ha sido un sector en crecimiento y muy lucrativo pero erróneamente explotado. Antes de la crisis actual, se empezaron a hacer ediciones de calidad de grandes títulos, pero se produjo una saturación del mercado que aún hoy pesa, más si tenemos en cuenta que en España, el mundo de la historieta (en general) no goza de la popularidad de los grandes mercados del cómic como Estados Unidos, Japón, Francia o Bélgica, y los precios no pueden ser tan populares, ya que las tiradas son más reducidas. Aunque las editoriales nunca han hecho públicos datos de ventas al respecto.

Ejemplo de 'manga' shojo. 'Marmalade boy'

Ejemplo de ‘manga’ shojo. ‘Marmalade boy’

Hoy el número de aficionados es más grande que nunca, pero consumen menos (por vías legales). La piratería está haciendo mucho daño a la cultura en general y al manga en particular. Los salones, convenciones y exposiciones que se celebran por toda España están abarrotados por una nueva generación de aficionados volcados con el cosplay (disfraces), pero con poco interés coleccionista. Los que sostienen el mercado editorial son una generación anterior, con mayor capacidad adquisitiva, a los que las editoriales están dedicando tiradas de mayor calidad, tratando por fin al manga como a los demás clásicos del cómic universal.

El ‘manga’ en Japón. Para los japoneses, el manga es algo que está integrado en su rutina, un medio de comunicación más. Es otra forma de expresión cultural que ha influido y recibido influencias de otras vertientes culturales como la literatura, el cine, la música y el teatro; llegando a ser la más popular de todas. En Japón, el 40% de la producción editorial anual está dedicada al cómic. Lamentablemente, no se publican datos sobre los beneficios que genera, pero cada nuevo volumen de One Piece (el shonen que más vende), supera ampliamente el millón de ejemplares vendidos. Fuera, las ventas han experimentado un importante incremento, triunfando en mercados tan herméticos y con tanta tradición en el mundo de la historieta como Estados Unidos,;así que la estética manga se ha extendido desde los libros a través de películas, juegos de ordenador, reclamos publicitarios y todo tipo de diseños.

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Comentarios

  • Borjous

    Por Borjous, el 14 abril 2014

    Gracias a dios, un articulo bueno sobre un estilo lapidado. Leo manga y veo anime desde que era pequeño (todos mis amigos y yo crecimos con Dragon Ball), y estoy hasta las narices de que la gente que me conoce un minimo diga que el manga es «infantil» o mierdas por el estilo, solo por ser dibujos animados. ¡Como si ellos no se tragasen todas las tardes Los Simpson!
    En fin, creo que se deberia potenciar este tipo de publicaciones, sobre todo para iniciar de alguna manera a la lectura, ya que son historias que dan mucho juego.

  • kike

    Por kike, el 14 abril 2014

    Buena introducción al mundo del manga. A ver si asi la gente se entera y no me miran raro por leer un manga a mi edad en el metro (50).

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